Restaurante mediterráneo en el Grao de Castellón

Platos que conquistan el paladar, un emplazamiento de ensueño y una atención exquisita; todo eso y mucho más te espera en nuestro restaurante mediterráneo en El Grao de Castellón, un espacio pensado para disfrutar con los cinco sentidos.

• La vista, con el maravilloso paisaje que se dibuja desde nuestra terraza.
• El oído, con el sonido de las olas y de la naturaleza que nos rodea.
• El olfato, con el aroma embriagador de las exquisiteces que preparamos.
• El tacto, con la variedad de texturas que llegan a tu boca.
• El gusto, especialmente, con el sabor inconfundible de nuestras delicias.

En La Ola rendimos homenaje a la cocina de nuestra tierra con un concepto renovado de restauración. Tomando como base las recetas de siempre, aportamos un toque personal con el que conseguimos crear identidad propia. Lo que nunca varía es la calidad, porque queremos que vivas una experiencia gastronómica de altura.

Nos encontrarás en el paseo marítimo del puerto, frente a la playa. Un marco incomparable para almorzar, degustar nuestro menú del día, comer en El Grao con tus amigos o celebrar tus momentos más especiales en familia.

¿A qué esperas para hacer tu reserva?

Claves de nuestro restaurante mediterráneo en Castellón

En La Ola estamos orgullosos de representar la cocina mediterránea que tantas alegrías regala al paladar. Abanderamos este tipo de gastronomía no por ubicarnos frente al mar que le da nombre, sino por guiarnos por los principios que la han convertido en Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Así, en nuestra carta otorgamos un protagonismo especial a los productos del mar o, lo que es lo mismo, pescados y mariscos. Algunas de las delicias que puedes probar si nos visitas son los boquerones fritos adobados, los mejillones al vapor, el arroz de carabinero, el arroz caldoso de bogavante o la caldereta de rape.

También damos su merecida importancia a frutas y verduras, presentes en muchos de nuestros platos. Por ejemplo: la ensalada de aguacate, manzana y langostinos, la sepia con alcachofas, la paella de verduras, el arroz caldoso de setas o la fruta del tiempo como postre.

Como no podía ser de otra manera, el aceite de oliva es el que se encarga de aportar sabor a nuestras elaboraciones, tanto a la hora de cocinar como de condimentar. Y para regar la comida, recurrimos a una selecta variedad de vinos, como bien manda la tradición.